16.2.12

Que el otro dé cuenta del crecimiento de mis uñas,
que sepa si se me empaña el deseo,
que evidencie mis gustos más censurables,
que ande con lupa sobre la línea vital que sin mesura publico…
(¿es exhibicionismo?, ¿es asalto?, ¿un peligro?.. )
Veo mi debilidad pinchada con chincheta en la pared de algún pasillo transitado,
pero el afortunado desinterés del viandante envalentona mi osadía…
Veo mi piel interna por fuera, secándose a la inversa por lo reversible del asunto...

15.2.12

Para Crisálida

Espejo………….. Imagen………….. Reflejo………….
..
La muda…………… El cambio……………. La espera……………….
.
Ha pasado el tiempo y los años se agrietan..
.. .. .. ..
Llega,
lo sé,
ya llega…
.. .. .. ..
Es la muerte floreciendo, es la vida a tropellada,
es lo que merece la metamorfosis y morada.
Es crisálida y libertad,
son,
por bandera,
unas alas.
.. .. .. ..
Salpico……. Me ubico……. Retrazo……. Abarco con el tacto el equilibrio de un desgarro;
Vivo amando.
.. .. .. ..
Y viene, ¿lo oyes?
Corre… gime su eco, crujen sus velos… para que recuerde la recomendación de lo apremiante:
Encuentra los puntos cardinales y el sesgo de la vida sin perder un segundo, con cruda inocencia, con la espada hendida en roja tinta, con copa de vino y sangre en tu río caliente…
.. .. .. ..
-Vente…, me dijo, sin miedo… Y al nombrarlo se enfundó feroz, arrancó mi voz castiza para abrirme a una deriva sabia y desnuda…

.. .. .. ..
.. .. .. ..

Será parir, ser parido, parirse a uno mismo…..

12.2.12

Son grilletes perecederos, el tiempo nace y muere en todo aquello que se honra de existencia, es la norma del segundero, del cambio por causas de crecimiento o evolución, es la gran pasión de lo inanimado por acercarse a lo humano...
Siento cómo flaquea la desesperación aquella, tan cargada de caudal, de abrumadora espontaneidad, esa necesidad de diálogo, ese requerimiento a la verdad y al abatimiento de secretos y silencio.. Me desplomaba sobre el gerundio de un siendo, repicaba ruidosa, sin esquemas ni algoritmos, sin releer lo escrito, puro respiro, como un acto pulmonar reflejo de lo irreflexivo…
Pero ahora, al caer mis plantas de los pies sobre la tierra, mi instinto me pide que limpie las pruebas de quién soy, me llama mediocre, me insta a que recorte las extensiones de lo sensiblero, que cambie de musa y de tercio, que olvide la obviedad de haberme quedado enredada en tu pelo, que traiga y llame a que revienten los volcanes sin buscar tu fuego e independice mis sueños de lo que simplemente es imposible o inconcreto.
Soy un ejemplo sin nombre, algo insustancial y sin importancia entre tantas palabras de tantas personas, entre tantas mujeres, tantas derramas y torniquetes, una molécula de desaliento, un cero en la cifra de la excesiva oferta sin demanda, un tiempo perdido pagado por otros, una corrida de toros sin sexo, un movimiento sin conciencia ni concierto.
¿Me aclaro?, ¿revierto?, ¿entiendo?, ¿me sirvo?
¿Por qué no se pierde la niña perdida que me absorbe y regurgita?, ¿por qué no me crezco y me dejo de dudas y adenopatías?, ¿por qué será siempre una pregunta continua?, ¿por qué pinto una raya fronteriza entre el buen hacer, el deber, y yo misma? ¿Por qué no puedo ser productiva, hacer lo que se me solicita, quedar satisfecha, bailar sin poesía?
Y para el remache, para que el disgusto se recalque, te sigo buscando, obsesiva, persigo insistente al arquitecto que proyecte el olvido sin daño, hago conjuros para no desearte a mi lado, cierro los ojos, te veo entre dientes, abro la boca, salivo sin orden, preparo un conato de cambio, boicoteo mis intentos, emano contrarios, me seco por exceso de esperanza, me lleno de lejanía, le lloro al llanto y a la alegría…

1.2.12

El lío en un embudo, el nudo desatado, un nunca permanente, un siempre abrumador...

Entenderte a través de otros ha traído de vuelta lo que el frío fue borrando…
No alivian tus formas emergiendo de esa sombra codificada, una fuerza extraña amordaza mi intentona de alejarte de la realidad en curso, me llaman los diablos que en mi hombro se acoplaron, contemplo el pasado como algo mágico que eclosionó, que no marchita, que trajo paz esa batalla, que el bamboleo de llamadas asientan y relajan al estancarse pacientes bajo la inmensa catarata.
Llené de nuevo mi concepto de ti con peso de persona, y di crédito a mis ojos… y la carcoma de lo rojo daba vértigo sin que siendo al menos la tercera vez me hubiese paliado el efecto… Es por ello que me agarro al silencio entre otras improntas que quedamos mantendríamos en privado bajo notas sin retoque, entre borradores de convulsas flores carnívoras, de luces asesinas del olvido, de tanta vida y tanto vino, de tanto naipe malabarista, de un absorber absorto…
y tal vez por ello ya no me enredo en enjuiciar la apesadumbrada duda sobre la jugada consecuente, sobre planes inminentes que adjudicaba con mi maniática manía de confundir o practicar el indulto a la palabra contraria, dándole otro sentido, lo giro, practico la escultura, lo entiendo a mi manera, me dices lo que quiera que te entienda…